¿Quiénes somos realmente?


Sin la menor advertencia, en cualquier momento o lugar, sin causa aparente, puede suceder...De improviso me encontré envuelto en una nube de color semejante a las llamas. Por un instante pensé en un incendio, en una inmensa conflagración en algún lugar inmediato; al momento siguiente comprendí que el fuego estaba dentro de mí. Entonces me inundó un sentimiento de júbilo, un inmenso regocijo acompañado, o seguido inmediatamente, por una iluminación intelectual imposible de describir. Entre otras cosas, no llegué simplemente a creer, sino que vi que el universo no está compuesto de materia muerta, sino que es, por el contrario, una Presencia viviente; tomé conciencia de la vida eterna que hay en mí. No era la convicción de que tendría vida eterna, sino la conciencia de que la poseía ya entonces; vi que todos los hombres son inmortales; que el orden cósmico es tal que sin la menor duda todas las cosas colaboran para el bien de todas y cada una de ellas; que el principio fundamental del mundo, es lo que llamamos amor, y que la felicidad de todos y cada uno es, a la larga, absolutamente segura. (Cita de R.M. Bucke)... Por esto y por muchas cosas más decidí iniciar esta aventura virtual.

miércoles, 26 de marzo de 2008

¿Sincronicidad o suerte?

Los milagros existen, son un fenómeno real. En todas las tradiciones escuchamos que hablan de milagros, con lenguajes diferentes. Decimos que un evento es un milagro cuando éste se manifiesta de manera sorprendente o poco común. Tenemos una intención, un deseo o un pensamiento y de pronto "sucede". Esto ocurre cuando una persona es capaz de aprovechar en el ámbito espiritual el tremendo potencial que tiene para manifestar o crear su realidad. Las personas que muestran poco o nulo interés en la espiritualidad, suelen denominar a estos eventos "suerte". Lo que la mayoría llama suerte, no es otra cosa que la aplicación de la sincronicidad, tengas o no conciencia de ella. La sincronicidad es simplemente el cumplimiento de nuestras intenciones. No existen las Casualidades sino las Causalidades. Debemos considerar las "coincidencias" como tremendas oportunidades para la creatividad, es como jugar y seguir las pistas para encontrar un tesoro, y para ello debemos estar muy atentos. Seguir estas sincronicidades nos llevan a convertirnos en las personas que el universo quiere que seamos o mejor dicho , en quien realmente somos.

Con frecuencia vivimos de manera rutinaria siguiendo patrones y actuando de manera predecible, día tras día. ¿cómo podriamos ver milagros si simplemente marchamos mecánicamente por la vida? Las coincidencias, sincronías o milagros, son en nuestra vida señales a las cuales debemos de prestar atención ya que nos llevan hacia algo importante, nos informan que algo más allá está ocurriendo. Podemos ignorar estas señales y continuar nuestra vida de inconciencia o pretar atención y vivir el milagro.

Cuando nos percatemos de estas sincronías deberíamos hacer un pequeño espacio y reflexionar ¿qué es en realidad lo que este suceso me está diciendo? Parafraseando al escritor y filósofo Rumi "ésta no es la realidad. La realidad está detrás del telón. En verdad no estamos aquí, ésta es nuestra sombra". Lo que llamamos realidad, no es otra cosa que una ilusión que nuestra mente nos dice que es real. Detrás del telón está un alma inmortal, dinámica, más allá de tiempo y espacio que quiere experiementar. Desde este nivel podemos influir conscientemente en nuestra realidad y hacer de nuestra vida una obra de arte.

Los Mayas hablaban de estar en sintonía con la madre tierra y por ende con el universo, viviendo en el eterno presente, el único tiempo real. Viviendo en el ahora podemos empezar a jugar el juego de la ilusión, sabiendo que es un juego y podemos hacerlo tan divertido o dramático como nuestra elección sea. Al fin y al cabo, las sincronicidades no son otra cosa que bromas que el universo nos lanza para empujarnos a jugar y divertirnos.

In Lakésh

No hay comentarios: